Hoy es el primer día en la agenda del 2012, primer día laborable. Se inicia con el recordatorio de actividades y compromisos, pero también el momento de anotar los retos que nos proponemos.
El tiempo del pensamiento, de la reflexión pasó cuando termino el 2011, ahora comienza el de la acción.
El tiempo de tener claras metas y propuestas ya anotadas para este año. Nos basamos en lo ya aprendido, en las asignaturas que ya conocemos para ir rumbo hacia aquellas que aun debemos aprender.
Es el tiempo de incrementar la luz que ilumina nuestro interno, el de las oportunidades.
Es nuestra agenda, un recordatorio diario de referencias a conocimientos, muchas veces olvidados o dejados de lado, es el momento de anotar nuestra historia personal tal y como queremos que ocurra y decidir que así será.
Es el tiempo de borrar los pensamientos que nos atan, que nos debilitan y transformarlos en los que nos fortalecen. Es el tiempo de alejar resentimiento, ira y miedos y cambiarlos por satisfacciones, serenidad y armonía. De desatar apegos, soltarlos y darnos el permiso de vivir sin ellos, de escribir en esta agenda 2012, como primera frase QUIEN DIJO QUE NO SE PUEDE?
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